Francisca siempre ha necesitado inventar a su familia. Un lugar de su pasado está escrito en su hermana muerta en otro continente. Huérfana de padres, un rollo fotográfico y la carta del último amor de la Oli, son los únicos vestigios y pistas para el inicio de una búsqueda tras las huellas de un misterio, cuyas respuestas se encontrarían en un lugar “como de otro planeta”: Sudáfrica.